Agua de ósmosis inversa: ¿pura y saludable para el consumo?

Sí, beber agua de ósmosis inversa (OI) es totalmente seguro y, de hecho, a menudo se considera una de las formas más puras de agua disponibles.

Este proceso de filtración avanzado elimina una gran cantidad de impurezas, contaminantes y partículas que el agua del grifo o embotellada común podría contener.

La ósmosis inversa funciona forzando el agua a través de una membrana semipermeable que retiene hasta el 99% de los sólidos disueltos, incluyendo:

• Metales pesados: Plomo, mercurio, arsénico.
• Químicos: Cloro, fluoruro, pesticidas, herbicidas.
• Sedimentos y partículas: Óxido, arena, lodo.
• Microorganismos: Algunas bacterias y virus (aunque no es su función principal y un sistema de OI suele incluir otros filtros para esto).

¿Y los minerales?

Una preocupación común es que el agua de OI también elimina los minerales beneficiosos. Si bien es cierto que el proceso retira una parte de los minerales, la principal  fuente de minerales para nuestro cuerpo proviene de los alimentos, no del agua.

La cantidad de minerales que realmente absorbemos del agua es relativamente pequeña. Para quienes deseen remineralizar el agua de OI, existen filtros post-ósmosis que añaden una cantidad equilibrada de minerales esenciales.

Beneficios para tu empresa

Para un entorno profesional, el agua de ósmosis inversa ofrece una solución de hidratación de alta calidad y confianza.

Garantiza que tus empleados y clientes tengan acceso a agua limpia y de sabor agradable, lo que puede mejorar el bienestar y la productividad.

Además, al reducir la necesidad de agua embotellada, contribuyes a la sostenibilidad y a la reducción de residuos plásticos.

En resumen, el agua de ósmosis inversa es una opción excelente para quienes buscan una pureza superior y una alternativa segura para el consumo diario.