¿Es mejor el agua mineral o la filtrada para una oficina?

El agua filtrada es la opción más recomendable para la mayoría de las oficinas. Se trata de agua del grifo que ha sido purificada a través de un sistema de filtrado avanzado. Esta solución ofrece varias ventajas clave:

• Sostenibilidad: Elimina la necesidad de botellas de plástico, reduciendo drásticamente la huella de carbono de la empresa.

• Economía: A largo plazo, el coste de un sistema de filtrado es mucho menor que la compra constante de botellones o botellas de agua mineral.

• Comodidad: El agua está siempre disponible y no tienes que preocuparte por el almacenamiento de botellas o la gestión de entregas.

La calidad de esta agua es excelente , ya que los filtros modernos eliminan impurezas, cloro y otros contaminantes, mejorando significativamente el sabor.

Agua mineral: ¿es necesaria?

El agua mineral embotellada, por su parte, proviene de fuentes subterráneas y contiene minerales específicos. Si bien es de gran calidad, no es la opción más eficiente para un consumo masivo en una oficina. Sus principales desventajas son:

• Coste elevado: El precio por litro es considerablemente más alto que el del agua filtrada.

• Impacto ambiental: La producción, el transporte y el reciclaje de las botellas de plástico generan una gran cantidad de residuos y emisiones de CO2.

• Logística: Requiere espacio para almacenar las botellas y una gestión constante de pedidos y reciclaje.

A menos que existan razones médicas específicas, el agua filtrada es la mejor opción para cualquier oficina. Ofrece un equilibrio perfecto entre calidad, sostenibilidad y coste, asegurando que tus empleados tengan acceso a agua fresca y deliciosa de forma responsable.